dose hacia los millones de billetes verdes en las taquillas. Spiderman 3
llegará a las pantallas el próximo viernes 4 de mayo con más explosiones, más personajes, más drama y más entretenido que nunca
Por: Aníbal Díaz GonzálezHabía una vez un perplejo y despistado joven llamado Peter Parker. Era huérfano, tímido y el típico nerd de su escuela, hasta que un día una araña radioactiva o algo así le picó y le dió poderes similares a las habilidades naturales de este insecto, convirtiéndose así en uno de los superhéroes más emblemáticos de la cultura pop gringa: Spiderman. Como a todo buen superhéroe de cómic ya le tocó que Hollywood le patrocinara su versión en la pantalla de plata, y éste próximo viernes 4 de mayo se estrenará la tercera parte de esta franquicia, siempre bien recibida por los fans de la historieta y el público en general. En pocas palabras, déjeme decirle que el filme está excelente, reúne todas las características de todo buen éxito taquillero y comercial: bombazos, personajes carismáticos y efectos especiales de primer nivel. En muchas palabras, ahí le voy. Spiderman 2 dejó al público con un final de cuento de hadas, en el que Peter Parker/Spiderman (Tobey McGuire), le revela por fin a la chica de sus sueños, Mary Jane Watson (Kirsten Dunst), que él es la persona detrás de la máscara del héroe arácnido. La doncella en cuestión le dice que no hay pez, que está dispuesta a correr el riesgo de ser raptada por científicos locos o algún otro "supervillano" con tal de estar con el dueño de sus quincenas. Peter es feliz como una lombriz y le jura amor eterno a la chamaca. ¿Ya la armaron, no?... ¿felices para siempre, verdad?... ¡PUES NO ES CIERTO! (ájale... perdón si soné como Adal Ramones).En esta tercera entrega, Peter y Mary Jane lidian con media tonelada de problemas. Por un lado, Mary Jane sigue tratando de sacar adelante su sueño de ser actriz en Broadway, ilusión que se ve truncada cuando es despedida en la puesta teatral de la cual era protagonista. Peter, por su parte, trata de seguir vendiendo fotos de Spiderman al Diario "El Clarín", pero si antes era difícil convencer al editor del periódico (JK Simmons) para que le comprara sus imágenes, ahora le será casi imposible al enfrentarse a un rival laboral, Eddie Brock (Topher Grace), un fotógrafo medio tranza y sin escrúpulos que hará cualquier cosa por conseguir un trabajo de planta en el diario. Por otro lado, Spiderman sigue siendo perseguido por un nuevo Duende Verde (James Franco), quien busca vengar la muerte de su padre el Duende original (William Dafoe), aparentemente a manos del superhéroe. A la lista de villanos se suma Sandman (Thomas Hayden Church), un ladrón de poca monta que esconde un trágico secreto y quien después de un accidente genético adquiere el poder de transformar cualquier parte de su cuerpo en arena. Por último, pero no menos importante, está uno de los villanos favoritos de los fans, Venom, una extraña criatura que se forma de la simbiosis entre una sustancia espacial (que antes le diera más poder y corrompiera a Peter) y Eddie Brock. A ambos personajes los une su odio por Spiderman y Parker y no se detendrán hasta eliminarlo de la faz de la tierra, no sin antes "surtirle" en donde más le duele. Como espectador y lector esporádico de cómics, lo que siempre me ha gustado de Spiderman es que su parte humana, Peter, es como cualquier hijo de vecina. A diferencia de Batman, quien es un millonetas que sale de cualquier apuro gracias a su chequera, o Superman que con su acto de reportero torpe le saca la vuelta a las cosas, Parker tiene problemas "normales": broncas con la novia o con los amigos, no completa para sus gastos, tiene que preocuparse por sacar adelante sus estudios, en fin, lo que cualquiera de nosotros puede estar enfrentando en la cotidianeidad diaria. Este recurso es explotado con la cantidad exacta durante el filme, provocando que el público ría, se sorprenda y hasta se preocupe por lo que pasa con los protagonistas. McGuire y Dunst siguen sin perder esa enorme química que los une en la pantalla, y los personajes secundarios como los interpretados por Franco, Church y Brock proveen el balance suficiente para hacer de esta cinta un deleite telenovelero. Mención aparte merece Bryce Dallas Howard, una bellísima (y poco conocida) actriz que interpreta a Gwen Stacy, una bella modelo que se convierte en una tentación para Peter y quien de manera no intencional ocasiona problemas en la relación entre él y Mary Jane. En cuanto a las intenciones de aventura y emoción, Spiderman 3 cumple y cumple bien. Los obligatorios efectos especiales sumergen a los espectadores en varias secuencias de pelea y acción que mantienen al público al filo de su asiento y con ganas de pedir más. Los efectos del cuerpo de Sandman al desbaratarse en el aire o al disolverse en agua son extremadamente detallados, así como las animaciones de la sustancia negra al unirse y separarse de Peter o cuando se convierte en Venom. Como que se alcanza a oler por lo menos una nominación al Oscar por mejores efectos especiales. En resúmen, Spiderman 3 es una película extremadamente entretenida y supera a las dos anteriores en todos los aspectos: mejor trama, más acción, mayor carisma y una gracia inigualable. Altamente recomendable.